Nuestro pilar fundamental han sido siempre y sigue siendo a día de hoy: La CALIDAD de producto. Dicha calidad, es clave para nuestro éxito y permanencia en el mercado. Para nosotros la confianza en nuestros clientes es primordial y para ello una constancia en la calidad es simplemente imprescindible.
Nuestra filosofía es tener un constante “espíritu emprendedor”, trabajando día a día con el objetivo de estar alerta e informados, de las demandas del consumidor y últimas tendencias. Para ello, nuestro equipo de Investigación, Desarrollo e Innovación (I+D+I) trabaja non-stop con el objetivo de conseguir el producto perfecto, que el mercado demanda o posiblemente demandará. La inversión constante en la innovación es fundamental.
Más de 4.000 metros cuadrados disponibles en nuestras instalaciones.
A partir de las mejores materias primas, nuestro departamento I+D+I investiga y desarrolla la formulación más eficaz según la demanda del mercado.
El envasado propio y control de calidad interno, nos asegura que las propiedades del producto lleguen intactas a sus manos.
Nuestra gran capacidad de almacenaje le aseguran una disponibilidad permanente e inmediata de toda nuestra gama de productos.
Visítenos sin compromiso, anunciándonos su llegada. Con mucho gusto les mostraremos todas nuestras gamas.
Luis Martínez Clemente, emprendedor donde los haya, decidió embarcarse en la aventura del mundo cosmético fundando ARUAL en 1949. En honor a su esposa, Laura, dió nombre a la marca, puesto que Laura leído al revés es ARUAL. Junto a ella, en un pequeño laboratorio del Barrio de Gracia, de la ciudad Condal, empezaron a formular y comercializar los primeros cosméticos de la marca.
Nuestra insignia, la crema ARUAL fue, como muchos otros éxitos de la vida, creado por casualidad. Luis Martínez Clemente formuló una crema para el cuidado de las manos como regalo a sus clientas por cada pedido que le hacían. Es decir, lo lanzó al mercado simplemente como un producto promocional. En pocos meses dicho producto promocional, se convirtió en lo que a día de hoy sigue siendo nuestra insignia, y lo que nos diferencia del resto de la competencia.
Luis Martínez Clemente, dejó en 2003 un legado imborrable en el mundo de la cosmética, por ser el emblema e icono de un gran emprendedor entusiasta y ante todo, una gran persona.
En sus inicios la fabrica estaba ubicada en la Calle Legalidad de Barcelona. A día de hoy el laboratorio está instalado en Sant Esteve Sesrovires; mientras que el edificio de Legalidad es considerado a día de hoy patrimonio de la ciudad condal por interés artístico e histórico.